miércoles, 8 de marzo de 2017

Embarazada…cómo? cuándo?....

Os explicaré un poco la historia de nuestro amor, y cómo llegó la noticia del embarazo:

Mi marido y yo nos casamos en octubre del 2015, justo después de llegar de la luna de miel decidimos que tras tanto preparativo bodil, pues fue una boda bastante DIY, sería buena idea seguir con ese estrés de preparativos, así que decidimos meternos en unas “fantásticas reformas” de esas que sabes cuando empiezas pero no cuando acaban; que empiezas por sólo querer reformar el baño, y terminas tirando paredes, levantando paredes, tapando ventanas y abriendo ventanales, quitando suelo, cambiando eletrodomésticos….las cosas a lo grande, así somos mi esposo  y yo...un full equip!!!
En abril, estábamos instalados de nuevo en nuestra nueva casa, quedando tras tantos cambios esos pequeñas perfecciones para que nuestro NUEVO HOGAR estuviese perfecto.

Y eso del estrés y los preparativos nos debieron de encantar, porque en mayo dejé de tomar los anticonceptivos y ya nunca más volví a ver a mi queridísima amiga “LA MENSTRU”.

Nuestra idea era empezar a buscar a nuestra #bolita a principio de este 2017….pero quizás no lo terminé de calcular muy bien, porque para esa fecha finalmente tenemos al ser más deseado con nosotros.

Realmente pensé que me costaría mucho más quedarme embarazada por la experiencia que sufrió mi hermana, pues fueron años duros de tratamientos y test de embarazos con resultado siempre negativo.
Mi marido siempre me decía:
-Chiqui, la primera que te meta....ZASSSS...te dejo preñada (suena algo vulgar, lo sé...pero siempre lo decíamos y nos moríamos de la risa) Lo hacía para hacerme reír, para que no me estresara, para demostrarme que él SIEMPRE iba a estar ahí….
Así que imaginad, mi cara en junio cuando noto que tengo dolores menstruales durante días pero quedan en eso….sólo dolores menstruales leves…
Así que empiezo a ponerme algo nerviosa; nerviosa a qué mi marido me dijese: te lo dije, te dije que teníamos que esperar un poco más, nervios a que estando embarazada no saliese bien, y miedo a no estar preparada….imagino que no soy ni la primera ni la última que le ocurre esto; y eso que nosotros teníamos claro que queríamos ser papás….pero como pasa en la vida, a veces por más planes que quieras marcar, las cosas vienen como vienen.

 Un día llego de trabajar antes que mi marido y le espero muy quieta sentada en el sofá. Imaginad la situación: entra mi marido por la puerta, y me ve, quietecita ….y tras esa imagen…su pregunta:
-Estás bien pequeña? Te pasa algo?-me preguntó.

Mi yo interior estaba aterrada, por un lado miedo a sí estarlo, miedo a no estarlo, miedo a estarlo y que a mi marido le diese un patatús….Así que le dije que se sentase….
-Me estás poniendo nervioso- me dijo- qué pasa?
-Creo que hemos hecho a nuestra Valentina, solté sin más.

Se creó un silencio, no muy largo, lo sé….pero lo suficiente para no saber que estaba pasando por su cabecita!!!
-Estás embarazada?-me dijo.
-No lo sé, no me baja la regla-contesté.
-Pues tendremos que ir a por un test de embarazo, venga vamos-comentó él.
Pero yo estaba aterrada; muy asustada….aún no sabía porqué. Noté que empezaba a ponerme pálida, y fue mi marido el que me dijo:
-Tranquila, hay que ir a la farmacia a por un test, venga voy yo- me dijo.
Pero esa noche teníamos cena, así que le dije que antes de llegar a cenar, nos pasaríamos por la farmacia, y así lo hicimos.

Antes de llegar a la verbena de San Juan, nos pasamos por la farmacia a comprar nuestro test y lo guardé en el bolso. Conforme pasaban las horas en la verbena, nos empezábamos a impacientar, y con la excusa de que la mañana siguiente nos marchábamos de puente, nos despedimos pronto de la familia y amigos.

Al llegar a casa, lo primero que hicimos fue meternos en el baño; hice pipi en un vasito de plástico e introduje, tal como me dijo la farmacéutica, el predictor dentro del vasito. Tapé el tapón y lo dejé en posición horizontal; mi marido se quedó mirando fijamente el test, y le dije que dejase de hacerlo; que le diésemos unos minutitos al aparato. Así que allí estábamos, mi marido, el predictor y yo, con un silencio raro…con nervios en mi estómago, y los ojos de mi marido llenos de vida…así recuerdo ese momento.
Cuando mi marido me dijo:
-Qué tiene que poner en el predicador? 
Y tal cual me lo preguntaba me giré a cogerlo y leí…EMBARAZADA….y tal cual se lo dije…..
-EMBARAZADA!!!
Mi marido me dijo:
-Embarazada, o si no, qué más puede poner, no embarazada?? 
Y le digo:
-…no, no…que pone EM-BA-RA-ZA-DA…..

A partir de ese momento, nos saltaron las lágrimas, nos abrazamos…nos besamos….y aunque esperábamos ir a buscarlo unos meses más tarde…creo que será nuestra mejor noche de san Juan de la historia…sin duda!!!!! No tiramos ningún petardo esa noche….pero nuestros ojitos fueron fuegos artificiales. Para muestra de ello.......una imagen:



Espero que os haya gustado!!!!!!!!!!!!!



No hay comentarios:

Publicar un comentario